Zenit 2-2 Sevilla: épica feriante

Empate que da el pase a semifinales al Sevilla FC. Dos errores de Beto, enmendados después con dos paradas salvadoras, dieron vida a un Zenit que no pudo hacer nada ante el gol de Gameiro, quien hizo posible la ´épica feriante´.


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El partido presumía de ser atractivo, y no fue menos. 2-1 en la ida, ventaja corta para un Sevilla que sabía, según Emery, que la eliminatoria podían ser 180 minutos o incluso más, y no faltó mucho para ese hipotético alargue. Beto volvía a la portería tras su larga lesión, y Carriço no fue menos al superar sus molestias. El Sevilla salió con Beto bajo palos, con defensa de 4 para Coke, Pareja, Carriço y Trémoulinas, mediocampo para Krychowiak, Mbia y Banega. bandas para Aleix Vidal y Vitolo y, como única referencia ofensiva, Carlos Bacca.

Inmejorable comienzo

Mientras en Sevilla transcurría la Feria, el Sevilla intentaba montarse la suya en Rusia, y no tardó en empezar. 4 minutos le bastaron a Vitolo para hacer que Neto le derribara en el área provocando un penalti que, aunque al principio dejó dudas, se vio, más tarde, que acertó el árbitro con la decisión, al igual que acertó Bacca con el disparo, subiendo así el 0-1 al marcador.

Mucha carne por asar, pero era el Sevilla quien tenía el partido de cara. Un 3-1 en el global le certificaba cierta tranquilidad, de la cuál abusó, más tarde, Beto. Minutos después del primer tanto, aunque las cosas rodaban a gusto del Sevilla, Nico Pareja tenía que abandonar el terreno de juego por una lesión que más tarde será dada a luz. Iborra sería el sustituto del defensa y Krychowiak ocuparía el lugar del argentino.

Cambio de guión

Empezaba a reaccionar el Zenit y sabía que los dos goles que necesitaba marcar no llegarían sin esfuerzo, por lo que se puso manos a la obra. Danny sería quien probara por primera vez a Beto desde un disparo que llegaba del interior del área sevillista. No sería esto más que el principio. Pero esto no significa que pudieran disponer de muchas ocasiones. El Zenit se crecía a la vez que lo hacía el Sevilla, para sorpresa de todos. Si unos intentaban llegar al área rival, los visitantes se encargaban de, con ayudas providenciales y una férrea defensa, cortar las acciones de peligros locales. Aún así, el partido mereció dar una recompensa al Zenit por su perseverancia, que avisaron con peligro, de nuevo, a Beto con un balón al palo.

Las réplicas de las oportunidades del Zenit las tuvieron Carlos Bacca y Aleix Vidal, quienes pudieron ampliar la ventaja en mano a mano frente a Lodigyn. Así, y con más dominio local se llegó al descanso, en el que, con 45 minutos restantes, se veía improbable la posibilidad de la remontada local, que tendría que consumarse tras haberse subido el 2-1 al marcador, lo cuál sucedió.

Reanudar el mismo juego

Tras las charlas técnicas se daba cavida a los segundos 45 minutos, que marcarían un trepidante final de encuentro. Tras esto, la tónica del encuentro seguía siendo la misma, control del balón del equipo que más necesitaba marcar (Zenit) y control de las ocasiones de peligro del mismo equipo. Mientras tanto, la defensa del Sevilla permanecía férrea y las ocasiones visitantes venían precedidas, casi siempre, de contraataques, en su mayoría, formados por transiciones rápidas que a veces dejó en evidencia la defensa del equipo San Petersburgo, pues había ocasiones en que la delantera sevillista llevaba más efectivos que la defensa del conjunto ruso. No ostante, todo esto sucedería después del gol local que daría esperanzas de avanzar en competición europea al Zenit de San Petersburgo.

Aunque el partido estaba en terreno sevillista y la calma había arraigado en el Sevilla y en el partido, llegó el exceso de confianza y esa pizca de nervios que un jugador tiene cuando no juega desde hace meses y su primer partido decide el porvenir de su equipo en competición europea. Hablamos de Beto, dejando a un lado la decisión de alinear a Beto o Sergio Rico (que ha traído cola), el portero portugués fue, durante varios minutos, uno de ellos. Aunque hubiera salvado en alguna ocasión al equipo en la primera mitad, un centro sin aparente peligro que iba a sus manos se convierte en un defectuoso rechaze que alcanza Rondón tan solo reanudar la primera parte (min. 47).

Ante este gol, como suele suceder, el conjunto que acababa de marcar se vino arriba, solo necesitaba un gol más para forzar la prórroga, que podría conducir a penaltis. No obstante, la reacción del Sevilla no fue mala, siguieron con su juego, más bien defensivo, y encontrando posibilidades a la contra. Es más, casi consigue ponerse por delante, otra vez, en el Sevilla en el marcador si no hubiera sido por un fallo de Coke a un metro de gol, eso sí, rodeado de defensas, aunque algo más pudo sacar el vallecano.

Hulk y Beto, aliados

Tras una desaparecida primera parte del talentoso delantero brasileño Hulk, su equipo reclamó de su ayuda y, muy generosamente, Danny le cedió el trono de referencia ofensiva hasta el final del encuentro. Éste, con la incomiable ayuda de Beto, dieron paso a la segunda celebración de la grada azul durante la noche. Un disparo lejano del ex-jugador del Oporto entró por encima de la mano de un Beto adelantado que no sabía donde meterse tras el gol. Ahora llegarían los peores momentos para el Sevilla. El asedio se hacía a cada minuto más intenso y las ocasiones del Zenit se sucedían una tras otra y, además, casi todas llevaban peligro. Hulk y Rondón fueron quienes más quebraderos de cabeza dieron a la defensa y al portero rojiblanco, que en este caso salvó en dos ocasiones claras al Sevilla de una catastrófica eliminación de UEL.

La prórroga se acercaba y solo quedaban 6 minutos para el final. Banega cogión un balón en su campo, lo condujo hasta trasladarlo a los pies de Vitolo, que lideró el contraataque que terminaría en gol. El canario pasó el balón por raso hasta la parte derecha de la frontal del área, por donde entraba un rapidísimo y acertadísimo Gameiro que cruzó el balón a la parte derecha del portero local, haciendo inutil su estirada y los previos minutos de dominio azul. Así, se llegó al final del partido y se consumió de nuevo otra épica. Aunque la consigna fuera que el Sevilla evitara la épica del Zenit, fue el Zenit quien debió evitar la épica sevillista, que, como hace 9 años, da una alegría inmensa al sevillismo en un Jueves de Feria, que será precedido por el sorteo del próximo viernes 24 a las 1.00 horas, momento en el que el Sevilla conocerá su rival para semifinales de UEL.


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