Flojo partido el disputado en la Ciudad Deportiva entre el Sevilla C y el Recreativo de Huelva B en la tarde del domingo. Un punto para cada uno que satisface a los recreativistas pero no a los de Chesco, que, con 18 puntos, bajan hasta la 7ª posición del grupo X de Tercera División, aunque a solo 3 puntos de los puestos de play-off.

Presentaba Chesco un once con varias novedades: finalmente no contaba con Eliseo (banquillo) ni con Buben (sin convocar), presumiblemente pensando en el decisivo duelo de UEFA Youth League del próximo miércoles. De esta forma, el juvenil Camacho ocupaba el centro de la defensa y el almeriense Adriano repetía en punta por segunda jornada consecutiva. Otro juvenil, Adrián Trabazo, entraba en el doble pivote junto a Carrascal, pues se quedaban fuera de la convocatoria tanto Álvaro Castillero como Orihuela.

Y la baja de Buben volvió a notarse. Sin él, el equipo pierde mordiente arriba. La primera parte fue un quiero y no puedo de los locales, que movían la pelota pero sin acercamientos efectivos. Un cabezazo de Adriano fue la única oportunidad reseñable.

Para la segunda parte Chesco introdujo a Miguel Martín para jugar con doble delantero, pero ni aún así. El juego no era fluido y sin embargo llegaron algunas ocasiones fruto de la competitividad de los sevillistas. La mejor: un lanzamiento de Víctor Morillo que no atrapó el portero onubense Sergio Reyes y cuyo rechace a punto estuvo de cazar Miguel Martín. 

Mirando lo positivo, el Sevilla C sigue sin perder en casa, Chesco le ha dado minutos de competición profesional a un par de juveniles del División de Honor, Camacho y Trabazo, y además Eliseo y Buben llegarán descansados al choque europeo del miércoles. La próxima jornada 12, el equipo se desplaza al terreno de juego del C.D. San Roque, 17º clasificado.

Amarillas para Camacho y Juanmi

El Sevilla C jugó con: Samuel; Gonzalo, Abel, Camacho (Eliseo, 56'), Juanmi; Carrascal, Trabazo (Miguel Martín, 46'); Cera, Raúl García (Torralbo, 46'), Víctor Morillo; y Adriano. Sin jugar: Javi Díaz (p.s.) y José Carlos Márquez.