En la mayoría de ocasiones se utilizaba como excusa el hecho de que el equipo tenía un partido importante en pocos días y tenía que reservar jugadores. Hay que recordar que la temporada pasada el Sevilla no perdonó ninguna eliminatoria, llegando a las finales de la Europa League y la Copa del Rey. Sin embargo, parecía curioso que siempre jugase como visitante a la hora de reservar jugadores, pues de local el Sevilla prácticamente sumaba de tres en tres salvo en la penúltima jornada ante el Granada y a principio de curso.

Es más, este mismo martes el Sevilla tiene un partido de Champions fundamental en Zagreb, donde una victoria le haría meter un pie en los octavos de final. Sin embargo, Sampaoli sabía que era necesario acabar con la psicosis, así que alineó a lo mejor que tenía y, por fin, llegó la tan ansiada victoria como visitante.

Es cierto que el juego no fue de lo mejor del Sevilla esta temporada, y a pesar de ir ganado 0-2, gran parte del sevillismo desconfiaba del resultado, pues no era la primera vez  que el Sevilla desaprovechaba una ventaja así. De hecho, llegó el empate en unos minutos de desconexión del equipo que hizo que muchos pensaran "Míralo, otra vez igual". Sin embargo, el jugar con tus mejores jugadores te da la posibilidad de volver a adelantarte en el marcador, y así Sarabia marcó el tercer gol, el que nos dio por fin la victoria.