La primera parte marcada porque el Sevilla en dos fogonazos en 2 minutos que encarrilaron el partido.
Primero Konopolyanka con su clásico disparo desde fuera del área y después Gameiro tras una combinación entre el propio Konoplyanka y Correa. El centro del campo formado por Kranevitter, Correa y Franco Vázquez no terminó de carburar, mitad por lo cargado de las piernas, mitad por la falta de coordinación. Lo que sí es cierto es que la propuesta de juego hizo que se arriesgaran muchos pases en la salida de la pelota.
En uno de esos pases arriesgados acabó Pareja enganchado con Osorio, lo que provocó que viera la roja. Después en el banquillo, alarmas encendidas: Pareja se mostraba muy enfadado y se echaba las manos a la cara mientras que se le exploraba la rodilla derecha, la misma que lo tuvo más de un año en el dique seco. El árbitro desesperó a todo el mundo y en el descuento de la primera parte Independiente también se quedaba con diez, por expulsión de Arboleda, y David Soria sacó un par de ocasiones peligrosas de los colombianos.
La segunda mitad fue por los mismos derroteros. Sampaoli hizo cuatro cambios en el descanso, propiciando el debut esta pretemporada de Fernando Llorente, y la dureza del conjunto colombiano siguió haciéndose patente ante las protestas del banquillo sevillista y la pasividad arbitral. Acortaba distancias a la hora de partido Moya tras una serie de rebotes en una jugada a balón parado, precisamente en la jornada en la que el Sevilla había entrenado la estrategia. David Soria salvó el empate de los colombianos en varias buenas acciones y con poco más que contar acabó el periplo estadounidense de los de Sampaoli.
De los nuevos, destacar el ímpetu de Sarabia, las buenas maneras de Correa y la necesidad de tiempo que aún reclaman Kranevitter o Vázquez. De los conocidos, la puntería con la que Gameiro y Konoplyanka han vuelto de vacaciones.
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