En lo que terminó siendo una nueva decepción, pero con el aliciente de que se dio en el Ramón Sánchez-Pizjuán, el Sevilla FC cayó sin atenuantes y con una humillante goleada por 1-4 ante el Granada CF. Con esta victoria, el cuadro de José Ramón Sandoval logró la permanencia en la primera división tras una temporada muy sacrificada, mientras que los de Unai Emery cerraron la temporada ante su afición con una nueva decepción.

El comienzo del partido fue muy intenso, con un disparo alto de Biraghi por parte del visitante y con un bombazo de Curro para el cuadro local que fue repelido por un atento Fernández. Una combinación entre Cuenca y Peñaranda finalizó con un intento del venezolano que fue tapado por Beto con muchos reflejos.

La acción continuó con un remate de Juan Muñoz tras un buen pase de Llorente que también fue atajado por un sólido Beto. Una subida de Konoplyanka dos minutos más tarde terminó con un remate desde el centro del área por parte de Muñoz que se perdió cerca del parante derecho ante la mirada de toda la defensa.

En los siguientes minutos, el partido se empantanó y todo lo que se había visto en los primeros 15' pareció esfumarse. Hasta que a los 30', un balón que quedó muy corto derivó en una corrida en soledad de Peñaranda, que eludió al portero pero chocó contra un cruce salvador de Kolo para evitar el primer gol de la tarde.

Reactivado, el partido siguió ganando en dinámica e intensidad, con un ida y vuelta notable por parte de ambos contendientes. El resultado estaba abierto en el Ramón Sánchez-Pizjuán, con los protagonistas dando un gran espectáculo pero sin poder vulnerar a los dos porteros de momento. Más allá de estar compuesta por una mayoría de habituales suplentes, este Sevilla pudo exhibir en el primer tramo del encuentro una imagen muy diferente a la que se venía observando en Liga BBVA hace más de dos meses.

Poco a poco, las dos líneas de cuatro bien apretadas del Granada complicaron la salida en velocidad del Sevilla. Apretando sobre la segunda pelota en el centro del campo, el cuadro de Sandoval logró mantener lejos de su portería al rival y al mismo tiempo sostener la presión alta constante jugando mano a mano con sus delanteros contra la línea de fondo del local.

Con el partido ingresando en una nueva meseta, El-Arabi intentó habilitar a Cuenca desde el borde del área pero su pase fue demasiado largo y el volante ofensivo no pudo conectarlo. Sobre el minuto 43', Peñaranda ingresó al área con el balón en sus pies y Diogo logró robárselo con mucha calidad a pesar de las protestas por un supuesto penalti al joven venezolano.

Y cuando parecía que la primera parte finalizaba con un empate en cero, los errores defensivos del Sevilla expusieron una vez más al equipo: en un centro en apariencia inofensivo, la línea de fondo dio mal el paso hacia adelante y le permitió a Cuenca controlar y definir en soledad ante Beto para marcar el 1-0 segundos antes de retirarse a los vestuarios bajo el grito de "¡Si se puede!" por parte de la numerosa afición visitante.


Los primeros minutos de la segunda parte transcurrieron sin que sucediese demasiado, con el Sevilla intentando hacerse del balón pero sin lograr superar a una ordenada y voluminosa línea de volantes del Granada. Tras varios minutos de letargo, Konoplyanka despertó al Sevilla con un disparo de media distancia que Fernández detuvo con una buena estirada sobre el minuto 54'.

El monopolio del balón por parte del Sevilla no se tradujo en situaciones concretas de gol, jugando al contragolpe con mucha comodidad el Granada. Bajo una lluvia de silbidos, Fernando Llorente se retiró del campo de juego reemplazado por el joven canterano Carlos Fernández de tan solo 19 años y con un historial de 15 goles en el filial la temporada pasada.

A los 72', el canterano Diego González sustituyó a Juan Muñoz, siendo esto lo más interesante dentro de un partido bastante aburrido. Pero en la jugada posterior, González generó un impacto inmediato y con un sensacional taconazo marcó el 1-1 luego de un centro atrás y un disparo que fue desviado a puro lujo por el recién ingresado.

El Granada buscó reaccionar con un disparo de Peñaranda, pero Beto controló la situación sin sufrimiento para generar aún más inquietud en un equipo que hasta hacía un minuto estaba salvado del descenso a la segunda categoría del fútbol español. Sandoval movió el banquillo reemplazando a Biraghi y a Fran Rico con Lombán y Rubén Pérez para encontrar mayor potencia en los metros finales y al mismo tiempo intentar sellar el centro del campo para como mínimo quedarse con una unidad.

Debido a una molestia física - por la sobrecarga de minutos tras una larga ausencia por lesión- Pareja se retiró ovacionado y en su lugar ingresó Carrico para disputar los 15' finales. Y dos minutos más tarde, Babin sacó ventaja de otro horror defensivo de la línea de fondo local en un centro al corazón del área y con un remate muy potente venció a un Beto completamente tapado por sus jugadores que poco y nada pudo hacer para evitar el gol que puso el 2-1 en la pizarra.

Al instante, Rochina fue reemplazado por René Krhin de cara a unos minutos finales vitales para un Granada ahora más retrasado y buscando cerrar el mediocampo con candado. Iborra llevó algo de peligro a los dominios de Fernández con un disparo rasante desde la derecha, pero el portero contuvo sin dificultades el intento del sevillista.

Como si el panorama no fuese oscuro, Diogo no pudo detener a Lopes en una larga carrera y le cometió penalti al lateral del Granada para desatar la euforia en la afición visitante. El-Arabi tomó la responsabilidad y con un notable remate bajo al palo izquierdo dejó las cosas 3-1 en favor del Granada para dejarlo a un pequeño paso de la salvación y seguir hundiendo al Sevilla en una Liga BBVA que ha sido magra.

Pero la fiesta no había terminado allí, ya que a los 87' la miseria aumentó para el Sevilla: Cuenca llegó al doblete robando una pelota muy fácil en la medialuna - en otro error defensivo- para quedar mano a mano con Beto nuevamente y sellar el 4-1 con un suave disparo hacia la izquierda. Con buenas noticias llegando desde otros estadios, festejando los aficionados y el banquillo del Granada, el partido finalizó en un estallido absoluto por parte de los jugadores visitantes, pues la victoria contundente en la otrora fortaleza sevillista logró dejarlos en la primera división por una temporada más.




Ficha Técnica:

Sevilla FC: Fernández; Biraghi, Costa, Babin, Lopes; Cuenca, Rubén Pérez, Doucouré, Rochina; Peñaranda y El-Arabi. 

Granada CF: Beto; Diogo Figueras, Nicolás Pareja, Kolodziejczak, Escudero; Iborra, Cristóforo; Curro, Juan Muñoz, Konoplyanka; Fernando Llorente.

Árbitro: Alberto Undiano Mallenco.

Goles: Cuenca 46', Diego González 73', Babin 79', El-Arabi 86' y Cuenca 88'.

Tarjetas: El colegiado amonestó a Curro, Kolo, Carrico y Diogo Figueras en el cuadro local y a Doucouré en el visitante.

Estadio: Ramón Sánchez-Pizjuán (Sevilla FC).