El
Sevilla FC sigue con su racha de victorias como local y no parece que vaya a
romperla pronto. Hoy su rival, el Eibar de Mendilíbar, se lo puso difícil y se
mantuvo vivo hasta el final, cosa que no suelen hacer los equipos que visitan
Nervión.
No era
partido para filigranas ni para lucirse. Quizá por eso Emery dio la oportunidad
a Llorente para que pelease con los
centrales visitantes. Por lo demás, el once de gala excepto Reyes por Vitolo, que se vació en el Camp Nou. Por su
parte, Mendilíbar apostó por un centro
del campo poblado, donde las subidas por banda serían para Lillo y un
correcto Juncá.
El partido
comenzaba con lo esperado, la zona de creación estaba atascada, Banega no se encontraba y Krohn Dehli,
consciente de ello ejercía de desatascador, intentando buscar por banda a un
incansable Tremoulinas. Justo así llego el único tanto del partido: el medio
danés centra desde la izquierda, Carriço toca suavemente y Llorente hace uso de
su corpulencia para darse la vuelta y mandar el balón a las redes, 1-0 (10´).
Como decíamos
no fue un partido vistoso, Sevilla y Eibar se
repartieron la posesión y se acercaron tímidamente a las respectivas áreas.
Tuvo de nuevo el ex delantero de la Juventus alguna de cabeza mientras que los
vascos se servían de los centros de
Juncá, que hizo un despliegue físico enorme.
Una vez
comenzada la segunda mitad, Emery se olía que no iba a ser nada fácil. El
Sevilla intentó salir fuerte y sentenciar, pero la defensa del Eibar estuvo más
que correcta y a penas dejó ocasión a los rojiblancos, que llegaron a sacar hasta doce saques de esquina, ninguno de
ellos con peligro. Los visitantes se mantuvieron vivos hasta el final, donde gozaron de ocasiones para empatar el
partido.
Primero
Sergi Enrich en una mala salida de Sergio Rico resbaló y marró un gol casi cantado, y más tarde Saúl Berjón con un fuerte
disparo de libre directo. El Eibar se acercaba pero se encontraba con un
infranqueable Sergio Rico, que se
reivindicó de su error anterior.
Anteriormente
Emery dio entrada a Vitolo, Gameiro e
Iborra sucesivamente, mientras que Mendilíbar apostó por un solo cambio, Saúl Berjón. Ninguno de ellos tuvo
incidencia en el partido, excepto Gameiro, que regaló un uno contra uno a Banega, que no supo resolver. También Iborra
mandó un balón a la madera en una
contra bien ejecutada.
En definitiva,
partido de esos difíciles donde lo único importante es sacar los tres puntos sin importar los medios. No
obstante, el gol de Llorente seguro que le da confianza y le ayudará en su progresión. Los de la capital andaluza
siguen al acecho de Villarreal, al
que recortaron hoy dos puntos.
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