El estrepitoso acontecimiento se produjo debido a que el jugador uruguayo había bebido antes de conducir, y no una cantidad moderada como expresó el consecuente positivo en el control de alcoholemia realizado al defensa.

De esta forma, el ex sevillista estrelló su vehículo contra la marquesina de una parada de autobús al entrar en el carril contrario por el que debía conducir su Ferrari. Tras el tremendo golpe, el jugador salió ileso y afortunadamente no se tuvieron que contar daños físicos ni en el zaguero ni en ningún ciudadano turinés, aunque el valioso coche saliera mal parado.

Además, la policía italiana procedió a multarlo y a quitarle el carné de conducir. 

Tras quedar enterada de lo sucedido, la entidad "bianconera" emitió el siguiente comunicado, por lo que el defensa perteneciente a la Juventus no jugará mañana contra el Sevilla FC. El escrito asegura lo siguiente: 

                 "Este comportamiento de Martín Cáceres, en la noche entre el 28 y el 29 de septiembre, es una grave violación de los compromisos asumidos en la Juventus, así como genera daños a la imagen de nuestra empresa. La Juventus, por lo tanto, aplica a las medidas disciplinarias oportunas al futbolista con la correspondiente multa y la exclusión temporal del jugador del primer equipo”